NEIVA, Enero 12 de 2015.- La Corporación Autónoma Regional del Alto Magdalena (CAM), reportó el nacimiento de una cría de la especie Agouti paca (Borugo) de sexo macho en el Centro de Atención y Valoración (CAV).
La cría, que nació de una pareja de esta especie que había sido decomisada en Neiva por la Red de Control Ambiental del Huila, pesó 0,8 kg, y permanece en buenas condiciones de salud al lado de su madre. Esta es monitoreada constantemente debido a que la hembra de esta especie se torna agresiva e incluso puede causarle la muerte a su cachorro.
La madre, por otra parte, está siendo alimentada tres veces al día, debido al gasto energético que implica el período de lactancia, y cuenta con una dieta especial rica en calcio y proteínas, Lo que también ayuda a que su cría gane peso y crezca saludable.
El borugo es un roedor estrictamente nocturno que vive en madrigueras. Comúnmente anda solitario, pero en ocasiones puede verse la hembra con su cría. Habita en el bosque lluvioso tropical, en ciénagas, bosques deciduos, bosques semi-deciduos y maleza densa, informó la CAM. Prefiere áreas cerca del agua. Se encuentra desde el nivel del mar hasta una altitud de 1.600 msnm.
El periodo de gestación es en promedio de 157 días. Produce una cría por parto, sin embargo, se reportan casos de partos gemelos. La cría es activa y abre los ojos inmediatamente, camina y come alimentos sólidos que la madre le proporciona previamente masticados a las pocas horas de nacida. La lactancia dura de 15 a 30 días concluyendo con el destete y alcanzará la madurez sexual entre los 8 y 10 meses.
Aunque la especie no se encuentra en categoría de amenaza en Colombia, la situación del Borugo es muy grave. Sus poblaciones naturales están mermando en tal forma, que hacen pensar en su total agotamiento en muchas regiones donde fueron abundantes. Sus principales enemigos son: los cazadores furtivos, los deportivos y los campesinos, que las matan en defensa de sus cultivos y el consumo de su carne.
Por el momento, la cría permanecerá en el CAM, pero una vez supere la etapa de crianza y destete, se le realizará una nueva evaluación física y comportamental con el fin de determinar la mejor opción para su disposición final (liberación y/o reubicación). Se trata de labores que se desarrollan de acuerdo con los protocolos establecidos en la Resolución 2064 de 2010 “por la cual se reglamentan las medidas posteriores a la aprehensión preventiva, restitución o decomiso de especímenes silvestres de Fauna y Flora Terrestre y Acuática y se dictan otras disposiciones”, dada por el Ministerio de Ambiente, Vivienda y Desarrollo Territorial.
