PINAR DEL RÍO (Cuba), Noviembre 26 de 2013.- (Por Adalys Pilar Mireles, PL) Cuba busca un mayor empleo de la energía solar, con la creación de parques fotovoltaicos y otras variantes como la instalación de paneles en zonas intrincadas o de difícil acceso.
Tales iniciativas forman parte de un programa nacional encaminado a promover el uso de fuentes energéticas alternativas, en sustitución de los combustibles fósiles tradicionales, de alto costo en el mercado internacional.
Dicho programa incluye la construcción de un parque solar fotovoltaico en esta occidental provincia, el primero de la zona, el cual se integrará progresivamente al sistema electro-energético a partir de 2014.
La instalación, en fase de proyecto ejecutivo, se ubicará en las afueras de esta ciudad y alcanzará inicialmente 2,5 megawatt de potencia, aunque en etapas posteriores pudiera llegar a 15, declaró a Prensa Latina el Máster en Ciencias Efrén Espinosa, al frente de la inversión.
Se trata -explicó- de un proyecto que aprovechará las bondades de una energía totalmente limpia, un paso más en el empleo de variantes renovables y armónicas con el medio ambiente.
Este año Cuba puso en funcionamiento un parque solar en la provincia de Cienfuegos, con características similares al proyectado aquí y 2,6 megawatt de potencia, considerado el de mayor envergadura en el país hasta la fecha.
Guantánamo, en el oriente del archipiélago, es otra de las regiones beneficiadas con esa modalidad de iluminación.
Al referirse a antecedentes de la experiencia en Pinar del Río, Espinosa recordó que en décadas pasadas la provincia sincronizó a la red energética nacional un pequeño sistema fotovoltaico, ubicado en el Museo de Historia Natural.
Distante 140 kilómetros de La Habana, en esta región funcionan paneles solares aislados en escuelas, centros de salud y comunidades, donde no es posible suministrar electricidad por las vías convencionales.
Esa experiencia permitió instalar televisores, computadoras y otros medios de enseñanza en pequeñas aulas de la nación, situadas en su mayoría en espacios rurales.
Áreas del parque Nacional Viñales y de la localidad de Pan de Azúcar, en las serranías pinareñas, disfrutan de esas bondades.
En Pinar del Río funciona la única planta cubana de módulos fotovoltaicos, la cual ha contribuye a electrificar apartados parajes de la isla y América Latina.
La fábrica amplía y diversifica ahora sus producciones con el fin de aumentar el aprovechamiento de esa energía luminosa en el país, adelantaron representantes de Cubasolar.
Distante 140 kilómetros de La Habana, el territorio incursiona también en la utilización del biogás como fuente energética, obtenido a partir de residuos provenientes del sector porcino.
Un grupo de hidroeléctricas forman parte, además, de la estrategia destinada a incrementar aquí el uso de las llamadas energías verdes.