Un amplio grupo de ambientalistas, liderado por Margarita Pacheco, se reunió esta semana con el fin de expresarle a la nueva ministra de Ambiente, Lena Estrada, la disposición de apoyar su gestión y de plantearle los temas clave que se deben abordar desde el Gobierno. La COP 30, la deforestación, los conflictos interinstitucionales ambientales -como el ordenamiento ambiental de la Sabana de Bogotá-, los asesinatos de ambientalistas, la gobernanza del agua y la educación e información ambiental, prioritarios para la agenda.
BOGOTÁ D.C.- Con el propósito de que las acciones ambientales sean del mayor alcance y eficiencia en los 18 meses pendientes del actual Gobierno, ambientalistas que buscan representar a todas las regiones colombianas se reunieron en el Museo del Chicó el pasado 14 de marzo y priorizaron las acciones más apremiantes en el marco de la política ambiental.
Entre las ideas principales que se le plantearán a la ministra Lena Estrada y que fueron recogidas en un documento por Carlos Fonseca, se plantea aprovechar al máximo las lecciones aprendidas en la COP 16 de biodiversidad en Cali de cara a la COP 30, con el fin de que el mayor número de colombianos "comprendamos con mayor precisión y profundidad la relación entre cambio climático, pérdida de la biodiversidad, contaminación ambiental y ordenamiento territorial alrededor del agua". En ese sentido, el grupo de expertos propone tanto la conformación de comisiones y mesas de trabajo estado-sociedad para recorrer el país, municipio por municipio, especialmente los más afectados por el cambio climático.
Por otra parte, se le planteará a la ministra la urgencia de ampliar la lucha contra la deforestación a las ciudades, para entender fenómenos naturales como el de los ríos voladores que se forman en la Amazonia, pero de los cuales depende, por ejemplo, la región andina. El foro ambiental constituido considera que ciudades como Bogotá deben trabajar conjuntamente con las regiones en estos temas.
En tercer lugar, los ambientalistas advierten sobre la necesidad de conformar grupos interinstitucionales para superar conflictos como el que afloró recientemente con el ordenamiento ambiental de la Sabana de Bogotá. "Los ciudadanos ambientalistas ofrecemos integrarnos a los grupos interinstitucionales de trabajo de estos temas, para que logremos entre todos solucionar ágilmente temas que nos competen a todos por encima de otros intereses", precisaron los asistentes a la reunión. Y aseguraron estar dispuestos a la discusión, al diálogo, con argumentos y razonamientos que buscan el bien común y la permanencia y restauración de la naturaleza como factor fundamental de la vida digna. "Estamos listos y dispuestos a hacer parte de las comisiones que se requieran, con esperanza, compromiso y alegría y por ello solicitamos ser formalmente incluidos", señala el documento que condensa las ideas principales de la reunión.
El asesinato de ambientalistas es otro de los temas por resolver, pues el país continúa siendo el país con el más alto número de ambientalistas asesinados y amenazados en todo el territorio nacional, en especial en las zonas rurales. "Requerimos y exigimos que el gobierno nacional, departamental, municipal el estado en todas sus dimensiones y expresiones ejecutivas, legislativas y judiciales, defienda más, proteja más, visibilice más el trabajo y la expresión de los ambientalistas en los territorios frente a actores violentos visibles y soterrados, como garantía para la construcción de una nación, de un país más sustentable y resiliente", expresan los ambientalistas.
Otro de los temas de alto interés tiene que ver con la educación e información ambiental. Al respecto, se dejó claro que el Acuerdo de Escazú debe potenciarse en todas sus expresiones y, adicionalmente, se debe suscitar una reflexión a nivel del sistema educativo formal e informal, con estrategias que permitan compensar la corriente reciente que pretende demeritar, relativizar, minimizar y ridiculizar el conocimiento, la ciencia, la tecnología e innovación que aporten a una mejor sustentabilidad y resiliencia ante los cambios ambientales actuales: "Colombia es un país especial, único por su enorme concentración de la biodiversidad y variedad geográfica, que requiere mucho más conocimiento y gestión diferente incluso a la práctica internacional de países localizados en otras latitudes y con otras condiciones socioeconómicas. Debemos construir más conocimiento propio y sentido de pertenencia para proteger y usar mejor nuestros recursos y territorio y el sistema nacional de educación no está logrando ese objetivo con la educación ambiental que imparte actualmente".
El Ministerio de Educación, el de Ambiente y otras entidades deben comprometerse a un trabajo más intenso y profundo, respaldados por el fondo de la vida y la biodiversidad, advierte el foro de expertos.
Desde el punto de vista de los ambientalistas reunidos, la evaluación y licencias ambientales también debe estar entre los temas priorizados por el Ministerio. "Si bien reconocemos también algunos avances en este campo, consideramos que tanto los métodos como los procesos siguen siendo los de muchos años atrás, sin abrir con la fuerza debida otros métodos como la evaluación multidimensional simultanea de los proyectos y la evaluación ambiental territorial, que permita apreciar la sinergia de varios proyectos en un territorio; adicionalmente, la convocatoria a las audiencias públicas, el proceso mismo de evaluación y los resultados, deben ser más divulgados y explicados", sostienen.
Adicionalmente, el progreso y ordenamiento territorial alrededor del agua, requiere al menos de tres acciones: activar con mayor energía y flujo de acción, el Consejo Nacional del Agua, los consejos de cuenca y los consejos directivos de las autoridades ambientales e, incluso, retomar ideas como la creación de la Agencia Nacional del Agua. En esta medida, se busca que el ordenamiento territorial del agua tenga expresiones concretas, como la solución de tratamiento de aguas residuales y, sobre todo, la garantía de los recursos para su operación; el avance de la política de agroecología y el aumento de cobertura vegetal protectora/ productora de conservación en cada municipio y departamento, como es el caso de los sistemas agrosilvopastoriles de ganadería regenerativa.
El ordenamiento alrededor del agua permitiría, además, programas más eficaces de ahorro y uso eficiente del agua y la energía, el rescate efectivo de los humedales, con particular atención al control de erosión y de aterramiento y desecación de ciénagas; programas de restauración comunitaria, propiciar la comprensión de la importancia de los ríos voladores, la necesidad de aprovechar mejor las aguas lleuvias, desplegar una campaña de fondo de eliminación real del mercurio y del cianuro en la tracción legal e ilegal de oro, diseñar e implementar un propósito nacional parfa salvar el río Magdalena.
De otro lado, los ambientales consideran que se debe trabajar conjuntamente con el Ministerio de Vivienda, Ciudad y Territorio para avanzar realmente en el tema de residuos sólidos y las cinco R -Reducir, Reusar, Reciclar, Reemplazar, Reincorporar. En este tema, se alcanzaría a fortalecer el gremio de recicladores en la medida en la cual se haga la coordinación necesaria, apuntan.
Para los ambientalistas, todas las ideas y propuestas planetadas requieren el trabajo mancomunado, no solo entre las entidades, sino con los ciudadanos voluntarios organizados que aporten al proceso y la gestión.
"La participación ciudadana proactiva, que sea más que la presencia en eventos o audiencias y haga parte de los procesos de reflexión y decisión interinstitucionales, podría agregar un alto valor por la confluencia de miradas complementarias y diferenciadas. Reiteramos nuestro total entusiasmo y compromiso para apoyar efectivamente su gestión", concluye el grupo de expertos, con la aspiración de reunirse muy pronto con la ministra para plantear de manera presencial todas estas iniciativas que buscan la gestión más proactiva en favor de la protección y conservación ambiental del país.