Bogotá, Diciembre 22 de 2012.- La presión de más de 100.000 personas en todo el mundo que firmaron una solicitud de Greenpeace, contribuyó a que el gobierno de Corea del Sur abandone sus planes de iniciar una caza "científica" de ballenas.
Según informó la organización ambientalista, una vez más sus fuerzas unidas en todo el mundo hicieron posible un cambio importantísimo para el planeta.
Greenpeace recordó que en Julio pasado Corea sorprendió al mundo cuando anunció sus intenciones de comenzar una cacería de ballenas. Pero su decisión se vio dividida entre la presión de países a favor de la caza y la fuerte crítica de ONGs, comunidades pesqueras y miles de personas que junto a Greenpeace comenzaron a reclamar por la protección de las ballenas.
Hace unas semanas la ONG inició una campaña para exigirle al gobierno de Corea que cancele sus planes y evitar la matanza de ballenas. "De haber presentado su plan de cacería, hubiera seguido los pasos de Japón", señala Greenpeace, al advertir que la potencia que practica y defiende con más fuerza una matanza que bajo la excusa ?científica" encubre una actividad comercial que hoy está en decadencia.