Pedro Ferreira, gerente técnico de Ganadería del Fonce, Foncegán, explicó que la decisión de dar un periodo de descanso a las vacas depende del tipo de explotación ganadera, sea especializada o doble propósito.
Ese periodo de vacaciones es una alternativa importante para que, según el experto, se regenere la ubre, que luego de estar activa por la constante producción de leche y ordeño, se desgasta.
“Las vacas que tienen un periodo de 9 o hasta más meses en producción de leche o 1 o 3 ordeños al día, entran a periodo seco para regenerar las células de la ubre. Es considerable tener el periodo voluntario de descanso”, anotó Ferreira.
La tarea de secar una vaca se debe planear mediante el estrés nutricional, que consiste en cambiar la dieta alimenticia del animal. En el descanso se pasará a proporcionarle un único suplemento o mezcla, puede ser de ensilado de maíz.
Por estrés nutricional disminuye la vaca disminuye la producción de leche, dijo el gerente técnico de Focegán, al indicar que el productor hace seguimiento al periodo seco para corroborar que no produzca leche.
La reducción total de la producción del lácteo va de la mano, además, de un secado químico. Cuando pasa de producir 25 litros a 12 o 10 se escurre bien la ubre con último ordeño y se hace un intramamario químico en cada cuarto de la ubre para que no produzca leche, explicó Ferreira, quien desde su experiencia con ganadería especializada en lechería de las razas pardo suizo y jersey ha sabido que el descuido de un ganadero que seca vacas puede llevar a que estas padezcan mastitis.
De ahí la importancia de hacer seguimiento al periodo de secado y pos secado, para evitar que la vaca disminuya su peso considerablemente o produzca leche durante el descanso.
El vocero gremial sostuvo que no es capricho del ganadero darle vacacione a las vacas. Además de la recuperación de la ubre, la res que estuvo en periodo de descanso tiene la capacidad de producir a futuro más leche y quedar preñada.
Ferreira señaló que es ideal enviar a la vaca a descanso en periodo de gestación. Escoger el momento preciso para ello es lo que debe considerar el productor. Lo ideal es que se seque cuando tiene 6 o 7 meses de preñez y durante 60 días. De esta manera, la res no es improductiva.
En Estados Unidos, contó el experto, eligen un periodo de secado de 50 días máximo en las vacas, porque tienen un sistema de 2,5 partos por animal en promedio.
En Colombia, se trabaja con de 6 a 8 partos con animales que llegan a edad avanzada, lo que afecta la producción de leche.