Por considerar que hay exceso de visitantes –por lo menos 3.000- al sendero de la Quebrada La Vieja, en los cerros orientales de Bogotá, la CAR expidió una resolución mediante la cual prohíbe provisionalmente toda actividad.
BOGOTÁ, D.C.- Debido al incremento significativo de personas que realizan caminatas ecológicas y pasivas (3.300 en promedio, cada fin de semana) en predios de propiedad de la Empresa de Acueducto de Bogotá-EAB y aledaños a la Quebrada La Vieja, ubicada en la Reserva Forestal Protectora de los Cerros Orientales de Bogotá, la CAR dispuso la suspensión provisional de actividades de senderismo, debido a que la EAB no ha presentado el estudio de capacidad de carga de la zona, que desde tiempo atrás se le solicitó por parte de esta entidad.
La medida de suspensión se toma por parte de la CAR Cundinamarca, ante la necesidad de regular de manera adecuada la presencia de ciudadanos en ese sector y paralelamente, evitar afectaciones ambientales al ecosistema que está allí consolidado y que debe ser protegido de manera especial. Ella se levantará una vez la EAB presente el mencionado Estudio de Capacidad de Carga y sea aprobado por la CAR.
Las verificaciones hechas por la autoridad ambiental también lograron establecer que, por la excesiva presencia de caminantes, se han causado impactos negativos tales como árboles caídos de especie de eucalipto, residuos forestales como ramas secas y hojarasca en la ronda y tala ilegal de vegetación nativa, entre otros.
“En los predios aledaños a la Quebrada La Vieja, las actividades de senderismo y turismo ecológico ponen en riesgo la función protectora de la reserva y la preservación de los recursos naturales presentes en la zona. Además, con estas actividades desarrolladas, se están incumpliendo los requisitos establecidos en el Plan de Manejo Ambiental, toda vez que se necesita saber cuántas personas pueden acceder al lugar, y solo con el estudio de carga se podría determinar la cantidad de visitantes permitidos”, explicó el Director General de la CAR, Néstor Guillermo Franco González.
El área donde se localizan los senderos de la Quebrada La Vieja funciona como una zona de regulación hídrica y corredor ecológico, así mismo, de acuerdo con la consulta realizada en la Cartografía Oficial de la CAR, además de esta corriente de agua, se encuentran otros cuerpos de hídricos que se abastecen de esta zona de recarga, constituyéndose en un lugar de vital importancia para la conservación, con alto valor ecológico, paisajístico y ambiental para la ciudad de Bogotá.