Por 91 años, el loro coroniazul (Hapalopsittaca fuertesi) se creyó extinto; luego, en el año 2002, el equipo de ProAves redescubrió una colonia de 60 individuos de estas aves en un fragmento de bosque de niebla en el centro de los Andes de nuestro país.
La Reserva está ubicada en el municipio de Cajamarca, Tolima; esta región es denominada la despensa agrícola de Colombia, lo que significa que cada vez se expande más y de forma insostenible la frontera agrícola en la región; así mismo, actualmente, en Cajamarca se desarrolla uno de los proyectos de infraestructura más importante del país, el Túnel de la línea, con el túnel se pretende unir al centro y suroccidente del país a través de la cordillera central. Sumado a esto, también se está construyendo la carretera doble calzada entre Bogotá y Armenia.
Teniendo en cuenta lo anterior, la creación de un área protegida que pueda conservar los últimos relictos de bosque altoandino, se convierte en un gran logro de conservación a nivel nacional.
La Reserva Natural de las Aves Giles-Fuertesi se encuentra ubicada entre los 3.200 y los 3.700 metros de altura, 149 hectáreas de bosques altoandinos y de niebla con 11 grados centígrados de temperatura promedio; además del loro coroniazul, en la zona se pueden observar otras especies de loro como el perico paramuno (Leptosittaca branicki) y el perico frentirrufo (Bolborhynchus ferrugineifrons) y algunas especies de mamíferos como el oso de anteojos (Tremarctus ornatus).
La Reserva se convierte en un área protegida a perpetuidad para la conservación del loro coroniazul y del bosque de la cordillera central, así mismo se convertirá en el centro de investigación de la especie, con el objetivo de ampliar el conocimiento de la historia natural de esta población, desarrollando estudios sobre el uso del hábitat, comportamiento y reproducción. Además, ya se está implementando el Programa Nidos Artificiales. En enero de 2010 se ubicaron 20 nidos artificiales con el objetivo de aumentar y estabilizar las poblaciones del loro, que se ven muy afectados por la falta de nidos naturales en la zona.