Bogotá, marzo 25 de 2011.- La Sociedad Mundial para la Protección Animal (WSPA) anunció su plan de acción para ayudar a miles de animales afectados por el desastre reciente en Japón. Después de una evaluación inicial, la WSPA se ha comprometido a ofrecer 150.000 dólares para apoyar los esfuerzos de un equipo de atención de animales en desastres, que incluye varios grupos locales de bienestar animal. Esta ayuda será una contribución al periodo de recuperación tras el terremoto y el tsunami.
En lo más complicado del desastre, los esfuerzos de la WSPA se concentrarán en establecer cerca de 30 albergues temporales para perros y gatos que acompañan a las familias evacuadas.
“Muchas familias japonesas incluían mascotas muy queridas e hicieron todo lo posible por protegerlas tras el desastre,” dice Lindsay Fyffe, del área de atención de desastres de la WSPA Internacional. “Uno de los grandes retos de las autoridades japonesas en este momento es proveer albergue temporal a estas familias, las cuales se considerarían incompletas sin sus mascotas.”
El equipo de la WSPA que evaluó la afectación de los animales en el desastre, reportó que, aunque los hospitales veterinarios y los albergues de animales que estaban cerca a la costa quedaron destruidos, aún hay unos que pueden ayudar. La gran mayoría de animales afectados son perros y gatos, y según el reporte, muchas personas han llevado a sus mascotas con ellas a los centros de evacuación.
La evaluación estima que cerca de 30.000 animales necesitan albergue de emergencia. Lastimosamente, las mascotas que no fueron evacuadas ya se consideran muertas, pues se reportan pocos animales abandonados a la fecha.
La situación en la Prefectura de Fukushima, afectada por radiación nuclear, sigue incierta. La WSPA vive una gran preocupación por el ganado y las aves de corral que han quedado en la zona de exclusión por la rapidez de la evacuación, donde los niveles de radiación siguen siendo demasiado altos para permitir el acceso de rescatistas o protectores de animales. Esos animales están en riesgo de contaminación radioactiva, deshidratación, inanición, enfermedad e hipotermia.
La WSPA está en una posición única, con personal entrenado de tiempo completo capaz de proveer atención inmediata a animales afectados por desastres en diferentes partes del mundo. La WSPA ha estado involucrada en muchas operaciones de asistencia recientes y pasadas, tanto individualmente como en coaliciones, como es el caso de Haití, donde más de 50.000 animales fueron atendidos tras el terremoto de principios de 2010. La WSPA también estuvo involucrada en la atención del mayor desastre natural de Japón, el terremoto de Kobe en 1995, cuando cerca de 9.000 animales fueron asistidos.
