Bogotá, junio 12 de 2011.- La prolongada ola invernal, que ha ocasionado fuertes estragos en el 88% del territorio colombiano desde noviembre de 2010, también ha afectado a cientos de miles de animales, entre los que se cuentan ganado, aves de corral y mascotas, lo que ha llevado a Sociedad Mundial para la Protección Animal (WSPA) a trabajar en operativos de asistencia para proteger el bienestar animal.
Esta semana, la WSPA, junto a su Unidad Veterinaria de Respuesta a Emergencias, estará en los municipios de Ubaté, Simijaca y Guachetá, en Cundinamarca, asistiendo a miles de animales, principalmente ganado, afectados en estas zonas por la prolongada ola invernal.
La ayuda, que se extenderá hasta la semana entrante, consiste en brigadas de asistencia médica veterinaria, especialmente, desparasitación y entrega de alimentos para contrarrestar el rápido declive de la condición corporal de los animales por la dura situación de evacuación, desplazamiento constante y falta de alimentación a la que han sido sometidos.
Las comunidades en esta zona del país, principalmente agrícola, dependen en de los animales para sobrevivir. De ahí que la WSPA concentrará su ayuda en los animales de pequeños y medianos productores, quienes por la pérdida económica, con gran dificultad pueden recuperar la buena condición de su ganado y esto se convierte en un problema de bienestar animal. Un ejemplo de la necesidad de estas comunidades es una cooperativa de 45 madres cabezas de familia que en calidad de pequeños productores no cuentan con los recursos para salvar a sus animales.
En coordinación con los directores de la Unidad Municipal de Atención Técnica Agropecuaria (UMATA) en cada municipio, el equipo especializado de la WSPA y asistirá no sólo al ganado sino a los otros posibles animales afectados como caballos, asnos, perros y gatos.
De otra parte, la WSPA informó que también ayudará a su sociedad miembro fundación caridad animal en Bucaramanga para reconstruir las casetas de su albergue para perros, ubicándolas en un lugar seguro lejos del rio para evitar que los animales sufran por los posibles deslizamientos.