Bogotá, Octubre 12 de 2011.- Profesionales del grupo de fauna de la Secretaría de Ambiente, en conjunto con la Policía Ambiental y Ecológica, decomisaron dentro de una vivienda en el norte de Bogotá un tigrillo y una tortuga que eran tenidos como mascotas.
De acuerdo con la información suministrada por la SDA, el felino fue adquirido por sus propietarios en el sur de la ciudad (barrio el Tunal) por $3.000.000 en el mes de mayo, según información que ellos mismos suministraron.
El animal de un año de edad y aproximadamente kilo y medio de peso, se desplazaba libremente por el patio de la casa y era alimentado con comida para humanos.
Según la SDA, esto le ocasionó un proceso de adiestramiento y que se acostumbrara a la compañía de las personas. Por esta razón no podrá ser liberado en su hábitat natural, ya que moriría rápidamente; lo más probable es que terminado su proceso de rehabilitación sea trasladado a un zoológico.
La incautación fue posible gracias a una llamada anónima sobre la tenencia ilegal de este animal silvestre; en el momento de la incautación la propietaria del animal realizó la entrega voluntaria de una tortuga morrocoy.
Los propietarios del felino advirtieron que estaban analizando la posibilidad de entregar al felino a un zoológico, ya que en la vivienda habitan niños y el animal en plena etapa de crecimiento podría representar un peligro para ellos.
Actualmente, los dos animales se encuentran en el Centro de Recepción de Flora y Fauna Silvestre, el hogar de paso de la Secretaría de Ambiente, donde son atendidos por biólogos y zootecnistas.
Según Juan Antonio Nieto Escalante, Secretario Distrital de Ambiente, “el comercio Ilegal de animales silvestres en las calles y sectores populares de Bogotá es un hecho, pero no siempre es denunciado. Los ciudadanos no son consientes del daño que se le hace a los ecosistemas y del delito que esto significa, por lo cual seguiremos realizamos campañas para educar a la ciudadanía y operativos para controlar el tráfico ilegal”.