Bogotá, enero 12 de 2012.-. El Ministro de Ambiente y Desarrollo Sostenible, Frank Pearl, exigió este jueves la suspensión de las obras del Túnel de Oriente hasta tanto se tengan estudios de impacto ambiental que permitan saber el efecto que esta obra pueda causar en la Reserva Forestal Protectora del río Nare.
Según lo informó oficialmente el ministerio, en los últimos meses, esta cartera recibió varias solicitudes de la Procuraduría General de la Nación, la Contraloría General de la República, la Alcaldía de Medellín y de la ciudadanía, quienes tienen preocupaciones sobre el posible impacto ambiental que esta obra generaría en la oferta de agua para las ciudades de Medellín, Guarne, Rionegro y Envigado.
"Después de varias semanas de análisis y de verificar que no existe la información ni los estudios de impacto ambiental que nos permitan saber cuál va a ser el efecto real del Túnel de Oriente, acudiendo al principio de precaución, hemos decidido asumir la competencia y exigir la suspensión de las obras", aseguró el ministro Pearl.
El 4 de junio de 2002, el Ministerio de Medio Ambiente autorizó la construcción del Túnel de Oriente, pero este proyecto inicial fue modificado el 15 de febrero de 2010 y en la actualidad tiene otras condiciones y características, en el trazado y la longitud de los túneles, lo que puede generar otros impactos en las cuencas hídricas.
El futuro de la obra que según el ministro Pearl, es muy importante para la región y el país, será determinado a partir de un nuevo estudio que haga una comisión integrada por expertos de Cornare, Corantioquia y la Autoridad Nacional de Licencias.
"Las obras viales son bienvenidas y necesarias para la competitividad y el desarrollo regional, pero estas deben respetar la naturaleza, de tal forma que se evite el deterioro grave de los recursos naturales renovables y sus posteriores consecuencias ambientales y sociales, que pueden ser irreversibles", concluyó el ministro Pearl.