Los empresarios colombianos interesados en vender Certificados de Reducción de Emisiones (CER) tendrán la oportunidad de participar en la primera subasta de estos papeles financieros a través de internet. El modelo de negociación, probado ya con éxito “en octubre pasado- por la empresa británica CantorCO2, en Chile, se repetirá en mayo de 2007.
Así lo dio a conocer en Bogotá, Sergio Vives, vicepresidente de CantorCO2 para Latinoamérica, compañía que en la actualidad tiene sede en Brasil y en Chile, en lo que tiene que ver con países suramericanos.
En una reunión preliminar llevada a cabo en la sede de la Embajada Británica, en Bogotá, el señor Vives explicó ante empresarios y periodistas de diversos medios, en qué consiste el sistema de transacción a través de internet, en lo que calificó como “un modelo transparente y eficiente” para negociar este tipo de papeles financieros.
El directivo empresarial mostró la experiencia de Chile, donde se llevó a cabo la primera gran subasta y aseguró que el sistema permitió vender la totalidad de CER previstos, por lo cual dejó un positivo balance para seguir adelante con esta modalidad de transacciones electrónicas.
CantorCO2, una compañía fundada en 1999, que ha realizado transacciones ambientales por más de un millón de dólares, busca convertir a Colombia en uno de los países con mayor movimiento comercial en lo que a CER se refiere, teniendo en cuenta que las necesidades del mercado a nivel mundial son de aproximadamente 1.500 proyectos de Mecanismos de Desarrollo Limpio (MDL) en procesos para aprobación por parte del Protocolo de Kyoto. De acuerdo con Vives, en la actualidad, más del 65% de proyectos de MDL provienen de China y de la India.
El directivo de CantorCO2 para Suramérica explicó que el precio de los CER se mantiene un poco estable y lo que se espera es que a partir de 2.012, cuando debe haberse cumplido con la exigencia del Protocolo de Kyoto en materia de reducción de gases que contribuyen al efecto invernadero, dicho bonos comenzarán a subir de precio.
Indicó, de otra parte, que los bonos cuentan con la garantía de instituciones financieras y que los empresarios pueden tener la tranquilidad de que la subasta electrónica no tomará más de dos horas. Igualmente, una vez cerrada la negociación, el precio por el cual fue negociado el bono será entregado en un plazo de 10 diás.
Indicó que si bien en un comienzo había mucha expectativa alrededor de estos certificados, en particular por parte de negociadores secundarios, ahora estos se han vuelto más selectivos y hay más prevenciones en cómo se vende y a quién se vende. De igual manera, manifestó que la burocracia del Protocolo de Kyoto también ha contribuido a hacer más lento el mercado de estos certificados.
Dijo que Colombia tiene un buen potencial para la negociación de CER no sólo por su alto potencial energético, sino por su población. A manera de ejemplo, comentó que Chile arrancó en 2001 y hoy ya el tema es muy claro para los empresarios de este país. Indicó que la compañía que él representa maneja aproximadamente el 80% de mercado de CER en Chile, 70% en Ecuador; 60% en Paraguay; 20% en Argentina, y aproximadamente 30% en Perú.
El Protocolo de Kyoto, que obliga a los países industrializados a reducir emisiones de gases efecto invernadero, le dan la oportunidad a países en vías de desarrollo como Colombia, a vender Certificados de Reducción de Emisiones a los países industrializados que firmaron el pacto para reducir el calentamiento global, entre los cuales se encuentra China, India y Rusia.
Para el mercado mundial de CER, el Protocolo de Kyoto estableció los Mecanismos de Desarrollo Limpio, MDL. Colombia, con el parque eólico Jepirachi, de Empresas Públicas de Medellín, en la Guajira; el proyecto hidroeléctrico de Amoyá, en el departamento del Tolima; y el modelo de transporte urbano, Transmilenio, en Bogotá, inició el proceso de negociación de estos títulos financieros.