El Banco Interamericano de Desarrollo, BID, en alianza con el Fondo para el Medio Ambiente Mundial (GEF) y el sector privado destinarán US$10 millones en proyectos de mitigación voluntaria de emisiones de gases efecto invernadero.
El objetivo principal de esta iniciativa, tal como lo señala la Fundación Natura, es “crear un mercado en el que las empresas, los gremios y las entidades públicas y privadas puedan compensar, voluntariamente, sus emisiones de gases efecto invernadero, transando unidades de reducción de emisiones verificadas, originadas en proyectos nacionales de carácter forestal y, de esta manera, contribuir a combatir el Cambio Climático Global”.
Roberto Gómez y Patricia Londoño, encargados por la fundación Natura de sacar adelante esta iniciativa, informaron que el proyecto está enfocado en títulos provenientes de conservación de bosques y procesos productivos sostenibles.
La gran industria está entendiendo que tiene un rol muy importante que jugar para contrarrestar el Cambio Climático, señaló Londoño en su intervención.
La directora de Natura, Elsa Matilde Escobar, recordó por su parte que este proyecto nació como un sueño en el 2007 y desde entonces ha ganado un creciente respaldo del sector privado.
El mecanismo consiste en que una empresa adquiera el compromiso de reducir sus emisiones de carbono en sus procesos productivos. Para esto primero hacen los cambios de infraestructura que necesiten sus instalaciones y sus procesos.
Una vez se cumple con este paso la empresa acude a los representantes de los proyectos forestales, para adquirir su bono que es un certificado de que sus procesos son amigables con el medio ambiente. Este documento indica que el proyecto forestal que la empresa compró a través del bono, ya hizo la tarea de la siembra de árboles, reconstruyeron zonas afectadas y ejecutaron acciones para prevenir la tala y contaminación en reservas naturales.
La iniciativa equivale a tener un sello verde de conservación ambiental, una tendencia fuerte en el mundo y que se está volviendo casi obligada para las empresas que quieran mostrar su grado de responsabilidad con el medio ambiente.
Inicialmente, la Fundación Natura tiene una lista de 10 potenciales empresas para acceder voluntariamente a estas unidades de reducción de emisiones verificadas.
El BID operará como agente implementador del proyecto y será quien desembolse los recursos que el Fondo para el Medio Ambiente Mundial entregará a Colombia para ejecutar el proyecto en los próximos cuatro años.
Aunque la contribución de Colombia al total mundial de las emisiones de GEI es muy baja (estimada en el 0,3%), el volumen de las emisiones nacionales ha mostrado una tendencia creciente en los últimos años.