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En el debate que se cumplió en el Congreso, para informar sobre las acciones de control de la población invasora de hipopótamos, especialmente en el Magdalena Medio, la ministra habló de eutanasia, traslocación y esterilización, entre otras medidas contempladas para controlar la sobrepoblación de esta especie en Colombia.

 

BOGOTÁ D.C.- En una sesión convocada por la senadora Andrea Padilla, en la comisión Quinta, para hablar de las acciones de control de la población de hipopótamos que se ha incrementado en la zona del Magdalena Medio, la ministra de Ambiente, Susana Muhamad, anunció, entre otras medidas, la traslocación de individuos a otros países que expresen su deseo y las condiciones para tenerlos; la esterilización y la eutanasia.

En medio del debate, que se prolongó por más de cuatro horas y en el que el presidente de la Comisión habló de todo menos de hipopótamos, algunos de los participantes defendieron el derecho a la vida de las especies silvestres, otros consideraron que no había más remedio que la eutanasia. Se refirieron también a la importancia del aporte académico para tomar las decisiiones más acertadas y a la necesidad de tener políticas claras en materia de tenencia de especies silvestres, para evitar casos como el que se presentó recientemente en el bioparque Ukumarí, donde dos chimpancés fueron abatidos, luego de que escaparan de sus jaulas.

La ministra Muhamad destacó el aporte de Cornare para trazar estrategias que permitan controlar la población de hipopotamos que pasaron de unos pocos ejemplares a 170, debido a la poca planeación de acciones de control, desde  la década del 80, cuando fueron introducidos por el extinto narcotraficante Pablo Escobar a la hacienda Nápoles, en el municipio de Puerto Triunfo. Precisamente esta corporación realizó el primer piloto experimental de inmunocastración de hipópotamos.

De igual manera, la funcionaria se refirió al estudio adelantado por el instituto Alexander von Humboldt y el Instituto de Ciencias Naturales (ICN) de la Universidad Nacional de Colombia, en el cual se analizó el impacto de estos individuos en los ecosistemas y las estrategias para controlar el incremento de dicha población, que ya ha ocasionado algunos accidentes con humanos.

Con base en dicho estudio, la ministra reiteró el peligro que representan estos animales para los ecosistemas, para otras poblaciones de animales y para algunas comunidades como pescadores artesanales, que se sienten amenazados cuando van a realizar sus faenas de pesca.