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La organización ambiental recordó el profundo amor de Gonzalo Cardona Molina, más conocido como Gonza, por las palmas de cera y uno de sus más cercanos huéspedes: el loro orejiamarillo. Conmoción nacional por este crimen.

 

Según lo describe Proaves, Gonza acompañó de manera permanente esta especie -Ognorhynchus icterotis- en peligro de extinción.El día que se enteró de la necesidad de apoyar la conservación de un loro que veía durante los últimos 81 individuos apenas sobrevivían en la Cordillera Central de Roncesvalles y, con las campanas de alarma sonando, era evidente que se necesitaban acciones urgentes para salvar a la especie, ante lo cual, solo una persona más que cualquier otra dio un paso al frente para responder al llamado y salvarla.

La organización cuenta, además, que durante más de 20 años, este líder ambiental acompañó incansablemente a los loros para asegurarse de que no fueran cazados ni que su hábitat no fuera destruido. “Lo hizo de una manera carismática en un momento de inmenso peligro e incertidumbre. Constantes batallas y escaramuzas entre militares y guerrilleros lo ponían en situaciones que amenazaban su vida, pero lo más importante para él era que los loros estuvieran a salvo”, indica la reseña.

Según Proaves, Gonza había sido amenazado por muchos bandos incapaces de comprender su amor por la especie y su desinterés en la política. “Los eternos enemigos de la paz, asumieron que él tenía otros motivos, cuando simplemente estaba impulsado a hacer algo diferente”.

En sus últimos días, durante el pasado mes de diciembre, Gonzalo alcanzó a realizar el último censo nacional del Loro orejiamarillo y la Cotorra Coroniazul, con datos muy positivos 2.895 loros en Roncesvalles. “La alegría desbordó su corazón con el orgullo del deber cumplido”, recalca Proaves.

Para esta organización, Colombia no solo perdió otra vida preciosa, sino que Roncesvalles perdió a un líder ambiental y al mejor de sus hijos, su familia a un ser muy amado, salvadores del Loro orejiamarillo.

El pasado 8 de enero fue la última vez que la fundación tuvo información sobre el guardián del loro orejiamarillo. Fue visto en la vereda La Unión, en el departamento del Valle del Cauca, en el camino que conduce de Barragán hacia Roncesvalles.

Indignación nacional

Como consecuencia del condenable crimen, el Instituto de Investigación de Recursos Biológicos Alexander von Humboldt rechazó y condenó el asesinato de Gonzalo Cardona Molina, y lamentó la pérdida de todos los líderes ambientales que han sacrificado su vida por defender los recursos naturales.

 "Es indignante que el segundo país más biodiverso del planeta siga perdiendo a sus grandes defensores a manos de la violencia. Personas como Gonzalo Cardona Molina no han hecho otra cosa que defender, cuidar y conservar nuestros grandes tesoros de flora y fauna. La biodiversidad colombiana está de luto", dijo Hernando García Martínez, director general del Humboldt.

García hizo un llamado para que cesen los atentados y asesinatos de los líderes ambientalistas colombianos, "personas que cumplen una vital y loable labor en la defensa de nuestros recursos naturales y que están en un alto riesgo por el conflicto armado y la violencia. La pérdida de cualquier guardián de la biodiversidad es una atrocidad que no debe continuar".