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Las tres primeras zonas francas, que favorecen a empresas como Ecopetrol, Anadarko, Petrobras, Repsol, Exxon y Statoil, contienen 13 bloques, los cuales tendrán beneficios en el impuesto de renta, IVA y aranceles. El anuncio del Ministerio de Ambiente puso en alerta a las organizaciones ambientalistas, dado el alto impacto que genera este tipo de operaciones en los ecosistemas marinos.

BOGOTÁ, septiembre 25 de 2016.- Con notoria preocupación recibieron varios sectores ambientales el anuncio del Ministerio de Minas, de la aprobación de las primeras zonas francas a través de las cuales se les ofrece incentivos a las empresas petroleras para las operaciones de exploración en el Caribe colombiano.

“Necesitamos continuar mejorando la competitividad de este sector y estimular una mayor inversión con el fin de adicionar reservas e incrementar la producción de hidrocarburos, generando, en el mediano plazo, mayores retornos para el Estado, vía impuestos y regalías”, afirmó el ministro de Minas y Energía, Germán Arce Zapata, a través de un comunicado de prensa.

Las tres zonas francas que favorecen a empresas como Ecopetrol, Anadarko, Petrobras, Repsol, Exxon y Statoil, contienen 13 bloques, los cuales tendrán beneficios en el impuesto de renta, IVA y aranceles.

El Ministerio de Minas y Energía inició este proceso con la expedición del decreto 2682 de 2014 con el que se permitió la creación de zonas francas permanentes. Además, con la expedición de este decreto se dieron los incentivos a las empresas para que se perforaran los pozos Orca-1, Kronos-1 y Calazu 1 de los cuales dos de ellos reportaron hallazgos de hidrocarburos, y logró el programa de sísmica más grande del mundo (30.000 Kms 3D).

“Tenemos un gran potencial en las operaciones costa afuera. Estamos volviendo a Colombia más competitivo para atraer más inversión al país, lo cual esperamos se traduzca en mayores reservas y producción de hidrocarburos que sigan aportando al desarrollo del país”, concluyó Arce Zapata.

Entre tanto, voceros ambientalistas se mostraron preocupados ante el alto impacto ambiental que este tipo de operaciones ocasiona en la zona del Caribe.