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En los próximo tres años, la Facultad de Ingniería Ambiental de la Universidad El Bosque sembrará un árbol por cada estudiante nuevo para obtener cerca de 10.500, con el fin de capturar 3.000 toneladas de CO2.

BOGOTÁ D.C.- Arrayanes, roble de tierra fría, macle y cedro de altura, entre otras especies nativas, serán sembradas por la Universidad del Boaque en la vereda Azafranal Alto, en el municipio de Silvania, con lo cual se espera revertir la contaminación de casi 2.000 carros al año.

Esta iniciativa es liderada por el programa de Ingeniería Ambiental de la Universidad El Bosque, a cargo del ingeniero Kenneth Ochoa, quien mediante el lema “El Bosque crece”, pretende sembrar un árbol por cada estudiante nuevo durante los próximo tres años y capturar así capturar alrededor de 3.000 toneladas de CO2 y generar más de 768 jornales de trabajo.

El ingeniero Kenneth Ochoa dijo la campaña comenzó en el 2016, cuando la Universidad recibió la Acreditación Institucional de Alta Calidad, otorgada por el Ministerio de Educación Nacional. En esa oportunidad, la Institución celebró dando 400 árboles a la comunidad universitaria. A partir de 2017, la meta es sembrar 3 10.500 árboles, que en tamaño, se puede comparar con 10 campos de fútbol.

Durante el estudio de su carrera profesional, los estudiantes tendrán la oportunidad de hacer seguimiento a la especie que la Universidad le otorgue, por medio de una plataforma digital. Adicionalmente, tendrán la oportunidad de comprar o regalar árboles aportando a la formación de un gran Bosque.

“En la Universidad El Bosque trabajamos por la calidad de vida de todos, por eso desde el programa de Ingeniería Ambiental invitamos a tomar conciencia sobre la importancia de plantar árboles y conservar todas las formas de vida, mejorar la administración de los recursos naturales y construir una mejor relación entre la humanidad y la naturaleza” , destacó el ingeniero Ochoa.

Algunos de los aspectos más relevantes de la iniciativa son:

Recurso Hídrico: En este lote está la bocatoma del acueducto de Azafranal el cual suministra agua potable a cerca de 200 familias de los sectores El retiro y Azafranal Alto. El recurso hídrico en años anteriores fue constante, pero por la tala indiscriminada de árboles, y por el cambio climático, este recurso comenzó a escasear.

Calidad del Aire: En esto momentos la calidad de aire se podría ver afectada por los cultivos que se tienen en la zona, la deforestación para pastoreo, paso de la vía Panamericana; vía nacional que tiene constante flujo de vehículos durante todo el año. Con este proyecto se recuperarán en la zona 2.940 toneladas de CO2, el equivalente al uso diario de 2.000 carros durante un año.

Economía y Comunidad: La economía del sector se basa principalmente en la agricultura, donde se tienen cultivos transitorios y permanentes. Dentro de los transitorios está el maíz, arveja, frijol, habichuela, tomate de árbol. En los permanentes se encuentran el cultivo de aguacate hass. Con el proyecto El Bosque Crece, además se están generando jornales, hasta la fecha 122, lo cual ayuda al progreso de la región en la generación de empleo.

Fauna: Dentro de las especies de fauna que se pueden encontrar en la zona de reforestación están las aves tales como copetones, azulejos, cardenales; mamíferos como tinajos, borujos, zarigüellas, osos perezosos; en reptiles hay especies como serpientes. Y varios insectos, los cuales podrán tener un ecosistema fortalecido y con mejor conectividad para asegurar la supervivencia de estas especies.

Con la siembra y cuidado de estas especies, se espera contribuir a la recuperación y conservación de la fauna y flora nacional, además el proyecto no solo hará aportes al ambiente, también tendrá un impacto social ya que las especies se comprarán a los viveros de la zona.