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La firma del director de la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca, Néstor Franco, habría sido suplantada para la adquisición de un predio en el municipio de Sopó, presuntamente con el fin de habilitar zonas de protección para obras de construcción, por lo cual la entidad presentó la respectiva denuncia ante la Fiscalía General de la Nación, al tiempo que pidió investigar a fondo estos hechos.

BOGOTÁ septiembre 3 de 2016.- La Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca, CAR, interpuso 18 denuncias ante la Fiscalía General de la Nación, organismo competente para delitos penales al conocer que el mismo número de documentos habrían sido objeto de falsificaciones.

Informes técnicos con una numeración ya existente y diferente objeto de visita, otros implicaban un falso permiso que la Corporación habría tramitado, algunas certificaciones, adulteraciones de los libros de registro y la última, conocida recientemente, corresponde a la falsificación de la firma del Director General, Néstor Franco

El indignante caso de falsificación de la firma del director de la CAR se presentó en una escritura pública de un predio en Sopó, Cundinamarca, donde el nombre del funcionario habría sido utilizado en la venta del inmueble, avaluado en $ 619,297.887.96, que pertenece a la entidad desde el año 1966, mediante la escritura 6162 de la Notaria 7 de Bogotá. Efectivamente, en la matricula inmobiliaria aparece una transferencia a título de venta en favor de Exenober Sanabria López realizada a través de la escritura 2458 ante la Notaria 14, ubicada en Teusaquillo.

Ilícita transacción de venta del predio se habría concretado el 9 de noviembre del año 2015, donde supuestamente firma Néstor Franco como director de la entidad, desempeñándose en aquella época como Secretario General; hecho no correspondiente a la realidad del funcionario y cuya firma claramente es diferente a la original.

Adicional a solicitar a la Fiscalía General de la Nación, las medidas cautelares correspondientes, la entidad ha pedido investigar de fondo este caso, pues resulta extraño que la notaría no utilizó el equipo de huella biométrica para detectar que se estaba presentando una falsedad de documento público y suplantación de persona natural.

Para la CAR estos hechos son de gran preocupación, pues no solamente se estaría suplantando a funcionarios, habilitando zonas de protección para construcción o realizar actividades indebidas; también, se podría estar estafando a personas en todo el DDepartamento, pues además de los casos señalados, se presentan otras suplantaciones en diferentes municipios.

En Soacha por un falso informe de laboratorio, en Cachipay por un aparente permiso de prospección y exploración, en Facatativá donde se ampara una madera mediante el salvoconducto y se da vía libre a su transporte, en La Calera por anexar documentación de la entidad donde se niega la afectación a ronda hídrica, con el fin de solicitar una licencia de construcción y otros casos similares en la jurisdicción CAR

Finalmente, la CAR hace un llamado a la opinión pública para que tome todas las precauciones y de esta manera evite ser objeto de estafa por parte de estos grupos delincuenciales; los cuales serán juzgados por los delitos de concierto para delinquir, falsedad en documento público y falsedad personal.